Page 158 - ::El Colegio de Sonora :: Repositorio Documental ::
P. 158
Sin embargo, a pesar de la visión negra de la ciudad, los nogalenses no dejan de sentir apego al terruño, en una visión de negación y afirmación espacial, una especie de sentimientos encontrados porque afirman un gusto por la ciudad con una “vergüenza” al no ser “bonita, u ordenada” según su visión. “...Nogales, me atrevería a decir que es la más atrasada...” “...me gustaría mucho que hubiera parques, avenidas, no son mas que dos, la topografía lo impide que haya avenidas, arreglar las poquitas avenidas que tenemos dos, tres, se está por construir ahorita, se está construyendo ya un eje vial, un distribuidor vial, vamos a ver a ver qué resulta del distribuidor vial vamos a ver, ojalá que sea algo de lo que se espera...” (Clarisa) “Pues la verdad de que tiene muy mal la infraestructura, como hay mucha gente de fuera está muy, como que no la hicieron con planos pues, está muy mal, o sea, ya ve que las casas están en los cerros, o sea, es demasiada la gente y Nogales era un pueblo y ya se hizo ciudad por el exceso de personas foráneas que han venido llegando, pero .... y me gusta pero no puedo decir que está bonita porque pues realmente no lo está, algunas calles sí están bonitas pero no todas” (Cinthia) La percepción que tienen de Nogales los habitantes de EDM de clase media no originarios de la ciudad no varía respecto a los nogalenses, sólo que en sus representaciones de la ciudad manifiestan un proceso de adaptación necesario o forzado, según las experiencias de cada familia. En sus representaciones consumen una ciudad insegura, limitada o deficitaria de espacio público, pero que no dejarían por que necesitan de ella. “Qué cosa le haría falta a la ciudad de Nogales? R. Todo, lugares no sé parques, centros recreativos, centros comerciales no sé de todo, de todo le hace falta a Nogales, está creciendo a como se puede, a donde pueda construir o sea no tiene una vista agradable no la tiene.” (Sandra)