Page 134 - ::El Colegio de Sonora :: Repositorio Documental ::
P. 134
que consideran que ha estado obrando positivamente durante toda su vida y que los llama a la fortaleza de la transformación. “[…]dentro de aquí hay una locura (la informante señala su cabeza) piensas y piensas, sientes que nadie te quiere, que estás solo, la soledad interna es uno de los síntomas más grandes que hay de la adicción, queremos llenar el hueco con alcohol, con drogas, con hombres y mujeres, con dinero, con placeres, pasiones, nada de eso lo llena porque el vacío es espiritual, es del tamaño de Dios y solo él lo puede llenar y cuando él lo llena no necesitas más y puede que en el camino tengas problemas y vuelvas a sentir el vacío, pero sabes que puedes volver a recurrir a él, yo no puedo, no puedo, él si puede y entonces se lo dejo a él; yo no puedo con lo de mi hija, pero él si puede, yo se lo dejo a él” (Reina, 51 años). “Les digo a las mujeres que no saben lo que se pierden, es una maravilla el grupo, contar con un grupo de apoyo, sales adelante porque sales adelante si quieres dejar de tomar y no quieres acabar con tu vida, búscate el apoyo de un grupo de alcohólicos anónimos. Si quieres hacerlo, si lo logras, porque de que se puede y de que sirve el grupo claro que sirve ¿Qué te puedo decir yo? Yo pensaba que no había ningún poder humano que me quitara el alcoholismo, claro que lo hay y hay uno sobre todo que es Dios, el poder superior como nosotros le decimos, cada quien lo concibe, hay un poder, Dios sobre todo, si uno quiere puede salir adelante” (Norma, 52 años) Llama nuestra atención el hecho de que algunas de las informantes señalan que existen diferencias entre el “Dios de los alcohólicos” y el Dios convencional. Esta creencia se erige como una forma menos culposa de ser responsable, lo que les permite aceptarse sin juzgarse cruelmente. 134
   129   130   131   132   133   134   135   136   137   138   139